La revolución que se produce en Italia durante el siglo XIII, con la aparición del dolce stil nuovo, será el marco del escenario de la literatura renacentista. Se empiezan a realizar obras en la lengua vernácula y se impone el amor platónico al amor cortesano como tema central de la literatura. Empezó una gran impresión y publicación de libros y textos clásicos e italianos posible gracias a la creación de la imprenta. La cristiandad es el tema principal, quedando los temas clásicos como segunda fuente temática. Los autores clásicos fueron muy seguidos y algunos renacentistas intentaran integrar el estilo clásico a sus obras. También influye en la literatura el desarrollo de la ciencia y la filosofía. Petrarca fue un gran investigador, que escribió importantes obras destacando por su estilo poético, sus sonetos y canciones. Escribió poesía en latín y en italiano, entre las que destaca una colección de sonetos titulada Canzionieri, que habla del amor no correspondido. Su obra fue traducida e influyó enormemente en Inglaterra a escritores del peso de William Shakespeare. Boccaccio fue otro famoso escritor que destacó en la narrativa. Su obra principal es el Decamerón, una colección de cuentos que se entrelazan en una trama en la que un grupo de jóvenes huye de una Florencia sumergida en la peste negra. También influyen en la literatura renacentista los cambios en la política. Las obras más famosas en este ámbito son: Historia de Florencia y El Príncipe, escritas ambas por Nicolás Maquiavelo. Destaca la importancia de las utopías como género típico de esta época además del ensayos políticos. En Inglaterra el desarrollo de la literatura es lento y complejo. Destaca una figura que se debate entre el hombre tradicional y el moderno. Este hombre es Geoffrey Chaucer, traductor de obras latinas, conocedor de la obra de Dante, Petrarca y Boccaccio con gran detalle. Toma la influencia de esta tríada literaria para elaborar los “Cuentos de Canterbury”, en sintonía con el Decamerón. Más tarde, durante el reinado de Isabel I se inicia el verdadero Renacimiento inglés. En poesía, destaca Philip Sidney (1554-1586), que en su obra Defence of poetry, defiende el nuevo estilo renacentista procedente de Italia. En prosa, este mismo escritor, escribe la novela pastoril Arcadia en la que sigue el modelo de La Diana de Jorge de Montemayor. En drama destaca, Christopher Marlowe (1564-1593), que escribe La trágica historia de Fausto, La matanza de Paris,… Marlowe anticipa los temas que posteriormente usará Shakespeare. En Francia, no llega el Renacimiento hasta el s.XVI. Debe su nueva literatura a Italia (al igual que toda Europa). La cumbre del Renacimiento francés, tiene su punto álgido con la aparición de la Pléyade, donde destaca Pierre de Ronsard (1524-1535). Escribe Odas, en donde hace una exposición de elementos clásicos que mezcla con una gran originalidad. El tema principal es el amor y la fugacidad del tiempo. Notas generales sobre la literatura Renacentista |